domingo, 16 de febrero de 2014

Una pausa o el final...

Por veredas angostas encontrarás las ensangrentadas huellas de los pasos que me condujeron aquí, cuerpos sin vida de monstruos imposibles hallaras si sigues mi camino hacia atrás, ecos de tristeza y dolor que resuenan en el pasado y se extienden al presente pero al fin aquí estoy, desnudo de ropa y con el bastón maltrecho que es mi propia dignidad, llamando a tu puerta con los nudillos fragmentados de tanto batallar durante un viaje que se antojó no tener designio ni final.

Estoy llamando a tu puerta con todas las fuerzas que me quedan, ¿acaso no consigues oírme? Ábreme la puerta y permíteme cruzar el umbral, dejaré fuera todo aquello que no es puro ni natural, soy solo lo que se ve y siente sin espejismo que mostrar, prometo no hacerte promesas y ser aquel que soy y que no se puede ocultar, me entregaré a ti mientras decidas ser mía. Me arrancaré los prejuicios y haré con ellos una vela con la que iluminarnos cuando las sombras nos envuelvan, despellejaré mis miedos y de sus jirones, con nuestros besos y caricias, coseremos una manta de ensueños para ampararnos cuando nos atrape el invierno. Nos alimentaremos de la carne de la desconfianza que sacrificaremos en el altar de nuestro deseo, soltaremos las cadenas de la pasión y ataremos con ella las represiones, estudiaremos en braille el lenguaje en que se comunican nuestros cuerpos, buscaremos las verdades que se ocultan tras el azul  iris, ahogaremos los reproches en la intensidad de nuestras miradas. Seremos nada y lo seremos todo mientras esta sonrisa brille como una sola luz en nuestras dos caras.  

miércoles, 5 de febrero de 2014

Perdición...

A veces todo sucede sin que nada pase, todo se dice sin articular una sola palabra. Quisiera que escucharas las que se agolpan y atragantan cuando estas a mi lado y que me las responda con una mirada, pero cuando me miras... no veo nada. Quizás hubiera una oportunidad, o tal vez fue una esperanza soñada. Es por eso que tengo que alejarme de ti, desprenderme de este intenso hechizo que has dejado en mi. Es imposible negar lo que me pasa cuando estoy cerca de ti, se ve la pasión que provocas en mi, el deseo con nombre que me inunda la sangre. A veces sueño con acercarnos y sentir tus labios y me avergüenza pensar que percibes como me estremezco ensoñado. Quisiera fundir nuestras pieles y hacer una sola, detener el tiempo mientras te desnudo, bombardear tu cuerpo de besos y caricias, naufragar en el azul intenso de tus ojos y llegar a ti,...quisiera ser todo para ti, aunque fuese por un día sin más...aun sabiendo que después querría más.